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Panchita

 

La premisa del proyecto fue erigir una casona que albergara un nuevo concepto de comida peruana. Por ello se recreó una atmósfera doméstica de las antiguas haciendas costeñas utilizando imágenes asociadas a esta tipología local que se encuentran en el imaginario

colectivo. Estos códigos reinterpretados constituyen una distopía.

 

Uno de los elementos representativos de este tipo de arquitectura es el muro, el cual se fragmenta en piezas sueltas que luego son integradas dentro de un gavión iluminado con una secuencia de colores blancos y rojos que recuerda la bandera peruana. El muro es el elemento principal de la fachada; forma la piel exterior que da escala y

carácter al proyecto.

 

Un gran espacio de ingreso, el zaguán, da la bienvenida y anuncia el acontecimiento gastronómico que se organiza en el interior. El comedor se distribuye alrededor de un espacio central, a manera de plaza, en el que todos los comensales participan del festín.